Hay tanto que me digo y quiero decirte también, que de repente mi mente se vuelve una carta para vos. Ojalá te llegue a la distancia, ojalá elijas leerme y ojalá volvamos a estar lo cerquita para acurrucarme en tu pecho.
Ojalá te imagines mi cara sonriendo, incluso en la distancia. Ojalá mi amor tan vasto florezca para llenarte de pimpollos.
Y yo acá, tan llena que me rebalso de oportunidades. Y yo misma soy pimpollo floreciendo en mi propia elección.
Quiero tanto cambio que me cambio la vida cada minuto que lo siento. Y siento pleno que rozo la locura del despojo de todo lo social que no se acopla a mis sentires. Mirame a los ojos cristalinos que no mienten ni de noche. Mas incluso sin vos, me sé tan entera que me colma la existencia.
P.D.: No importa cuando lo leas.
P.D.: No importa cuando lo leas.
P.D.2: Mentira, sí importa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario